«Remote Buenos Aires» por Fernanda Blanco

El Cementerio de Recoleta serA? el punto de encuentro. Puntuales y con ropa cA?moda entramos, nos dan un aparato con auriculares, y esperamos al lado de la estatua de un Cristo a que comience a hablarnos una voz. AsA� comienza Remote kamagra and the fda. Buenos Aires, en el marco del No prescription pharmacy augmentin FIBA (Festival Internacional de Buenos Aires).

A medida que escuchamos la voz, vamos transitando el espacio, vamos activando la imaginaciA?n a travA�s de preguntas, vamos desarrollando una mirada extraA�ada, nos vamos cuestionando lo dado, lo cotidiano y agudizamos el observar. Nos preguntamos para quA� estamos acA?, quA� son todas esas bA?vedas, esos lujos de seres que ya no existen, indagamos en recuerdos. Nos preguntamos por quA� y para quA�.

Aceptamos el acuerdo de respetar la voz que nos habla a travA�s del auricular; nos manejamos en grupo, en masa, en rebaA�o; y hacemos visibles esas pautas culturales del respeto y la educaciA?n. Nos hacemos cargo del caminar solemne en un cementerio, de observar a los otros y de tomar decisiones. AsA� nos vamos moviendo hasta salir del cementerio. Recorremos la Ciudad guiados por una mA?quina, nos movemos en conjunto, como manada, y lo aceptamos. Vemos la Ciudad como una gran escenografA�a en una obra de teatro, somos espectadores y protagonistas a la vez. Cruzamos semA?foros, nos sentamos en el piso, subimos y bajamos escaleras, abrimos puertas, atravesamos jardines, nos miramos.

Nos miramos y nos unimos para entrar en una foto, un pequeA�o recuerdo. Corremos, nos cansamos, nos tomamos un tiempo para pensar solitarios y volvemos a arrancar. Hacemos grupos y subgrupos. Obedecemos y cuestionamos a la vez. A?QuiA�n decide? QuA� ropa usamos, quA� comemos, cA?mo debemos comunicarnos en las redes, quA� soA�ar, quA� temera�� A?QuiA�n decide?

Nos alejamos del espacio que conocemos, de esas calles que pisamos tantas veces, del hacinamiento del subte, de esos shoppings, esos objetos que compramos para llenar un vacA�o. Nos extraA�amos de lo que percibimos como normal, como cotidiano. A?Por quA� nos identificamos con objetos? A?Por quA� nuestra personalidad se ve reflejada en objetos sin vida? Seguimos en masa. Ahora somos un grupo de 50 personas divididas en tres grupos. Todos juntos, sin hablarnos, con auriculares. Nos movemos entre personas a�?fuera del juegoa�? y son pocos quieren voltean a mirar quA� pasa. Nos camuflamos entre tantos otros con auriculares que no se hablan. Entramos a un subte con la luz del dA�a y salimos al anochecer.

Seguimos siendo un rebaA�o, o tal vez ya somos comunidad. Nos movemos juntos pero no paramos de observar. Curiosos de la experiencia, aceptamos revisar lo dado y volver a mirar con otros ojos. No le tememos al ridA�culo, confiamos en quien nos guA�a. Nos diferenciamos nosotros tambiA�n, pequeA�a manifestaciA?n de nuestra particularidad, alzamos los puA�os al viento y nos perdemos en un baile a la vista de todos pero que se siente como si nadie estuviera mirando. Aunque nosotros mismos estemos mirando. Menuda experiencia espectadora. Subimos al cielo y podemos verlo todo desde otro A?ngulo. Siempre hay otro A?ngulo para mirar.

Mientras mA?s cansados, mA?s predispuestos a la reflexiA?n. El cansancio, el ridA�culo, la entrega, todo se vuelve parte de la experiencia. Como espectadores protagonistas nos volvemos un pA?blico ideal: dispuesto a jugar. Pero tambiA�n dispuesto a las sorpresas, y dejar escapar alguna sonrisa traviesa cuando la perfecta sincronA�a de la experiencia nos da un mimo, un saludo inesperado o un chiste que no esperA?bamos. Caminamos hacia atrA?s para olvidar lo pasado y atraer el presente, miramos hacia adelante para seguir avanzando. El recorrido se va acompaA�ando por el clima de la mA?sica, de los otros, de la Ciudad, de nuestro estado fA�sico, de energA�a inicial, de adrenalina, agotamiento, vA�rtigo, encierro. Un recorrido sensorial donde vamos superando obstA?culos para llegar a la cima. Un juego. Una experiencia para vivir las artes escA�nicas y animarse a jugar.

«Remote Buenos Aires» forma parte de la programaciA?n del FIBA:

AutorA�a: Stefan Kaegi
CompaA�A�a: Rimini Protokoll
DirecciA?n: Stefan Kaegi
DirecciA?n e investigaciA?n en Buenos Aires: Aljoscha Begrich
Concepto sonoro: Nikolas Neecke
DiseA�o de sonido: Nikolas Neecke, Ekaterina Reshetnikova
Dramaturgia: Juliane MA�nnel, Aljoscha Begrich
ProducciA?n: Caroline Gentzpurchase Bentyl